martes, 22 de marzo de 2011

La Carretera

Recuerdo haberlo pasado muy mal viendo The road, el filme basado en la novela homónima de Cormac McCarthy, un autor de moda en nuestros días. La historia cuenta la desesperada lucha por sobrevivir de un padre y su hijo de corta edad en un mundo post apocalíptico sin futuro alguno. En ningún momento se nos dice qué ocurrió para que el mundo se convirtiera en un infierno y el hombre en un lobo para el hombre. Mediante Flashbacks sabemos que el apocalipsis simplemente llega en un abrir y cerrar de ojos, y es inevitable no pensar en una posible hecatombe nuclear. Asistimos pues al desolador éxodo que viven padre e hijo. La pesadilla que están padeciendo hoy los japoneses no es muy distinta a la de este relato, y me cuestiono seriamente el uso de la energía nuclear y en si realmente estamos preparados para soportar las graves consecuencias en caso de accidente. Las cifras de Japón dan miedo.
Publicado Hoy 22 de Marzo de 2010 en "El Diario de Almería"

A CONTINUACIÓN OS CUENTO ALGO MÁS SOBRE EL PROCESO DE GRABACIÓN DE LA REEDICIÓN CON COLABORACIONES DE "LA VIDA SECRETA DE PETER PARKER":


Por fin cumplí el deseo de grabar la nana dedicada a mi hija e incluida en “La Vida Secreta de Peter Parker” con Miguel Dantart. Ya ha llovido desde aquel primer disco que recogía bellísimas canciones como “Dolores y José” o “Romance de Doña Adelita”. Supe que quería que Miguel debía irrumpir en la Reedición de colaboraciones cantando “Duérmete Ana” por la dulzura de una de sus canciones que a mí me parece maravillosa: “En la palma de tu mano”. Miguel es capaz de darle a una Nana la medida justa de ternura, era él y sólo él quien debía hacer esta colaboración. Un sueño cumplido y una deuda eterna que mantendré con él toda la vida. Lo pasamos muy bien. Miguel estaba exultante e ilusionado y eso me encantó. Hemos hecho una versión ligeramente distinta, enriquecida, más celta, más potente… Sin dejar de perder el contento de Nana, Miguel la ha dotado de cierta épica. Es lo bueno de una colaboración, el invitado introduce sus matices, su talento, otorgándole un sabor nuevo al resultado. Está siendo muy reconfortante revisar el disco sabiendo que este repaso es un cierre de despedida a una larga andadura vendiendo el concepto de la dualidad cotidiana. Miguel Dantart lleva una doble vida e incluso “se juega” una de esas vidas trabajando por las mañanas, como yo, él no sólo se dedica a la música. “¿Acaso conoces a muchos músicos mileuristas?”- Me decía ayer. Y es cierto, no hay. O no hay apenas. Hace casi un par de semanas una furgoneta de reparto casi le aplasta una pierna cuando iba a hacer una gestión de trabajo montado en su Scooter. Saber que existe más gente que como yo, además de dedicarse a la música, debe emprender cada día una batalla cotidiana, un madrugón para mantener su fortín, qué quieres que te diga… Hace que me sienta menos solo.

Con Miguel Dantart y Adán Latonda en el Estudio Fonofox (Foto: María Achaerandio)
Miguel, de verdad, muchas gracias. Gracias por esa ternura que irradias dentro y fuera del mundo de la música, el rato compartido ayer es sólo un átomo de la amistad que me gustaría seguir forjando. Gracias por ser y haber sido banda sonora en mis días, de amor y desamor, y por supuesto, por acariciar el sueño de mi hija aportando tu voz en esta Nana que casi llevaba tu sello cuando la compuse. Por cierto, y creo que a todos nos encanta ese estilo a lo Glen Hansard, con la barba roja, el pelo alborotado y la camisa de cuadros.

Javier Bergia ha grabado ya su parte en “Bailando en una nube de cartón”, está grabando su nuevo disco y está deseando de echarse a la carretera a hacer conciertos cuando cierre la gira con Ismael Serrano. En ese paréntesis de grabación y producción de su último trabajo se ha puesto las pilas para colaborar conmigo. Comentamos la idea de preparar una serie de conciertos juntos, desde luego a mí me hará muy feliz compartir con él viajes y encuentros.

La semana que viene le toca el turno a Lucía Caramés, la única voz femenina del disco, pero ¡qué voz! Os recomiendo que escuchéis el disco “La niña de la teta”, es un trabajo excelente que Lucía ya presentó en Galileo el año pasado. Un disco de esos de cabecera con temas impresionantes. Ella cantará “Vas a agradecerle al mar” en el disco. Estoy deseando verla trabajar.



Y ahora, agarraos los machos. Noticia de última hora que ya os puedo confirmar: Pablo Guerrero colaborará en el disco haciendo conmigo “Chelsea Hotel”. La semana que viene, Adán Latonda y yo estaremos acompañándole en el estudio para poner calma, sentimiento y profundidad a los versos de Cohen traducidos por un servidor. No sabéis la ilusión que me ha hecho escuchar su voz al otro lado del teléfono móvil, no he podido evitar imaginarme su sonrisa envuelta en su barba marinera y sus ojos sinceros mientras oía mi propuesta. Significa mucho para mí que Pablo participe en el disco. Estoy muy emocionado.

La semana que viene espero contaros más.

Un abrazo enorme.

9 comentarios:

Joaquín Pérez Azaústre dijo...

Querido amigo, me ha gustado mucho la columna y la comparto totalmente: ¿qué futuro nos espera? Además de eso, es alucinante lo rápido que te has adaptado a la extensión breve. En muy pocas líneas, consigues plantear el tema central como un interrogante, para, a continuación, esbozar sugerencias no categóricas, jugando con la implicación del lector. Hay columnistas que se pasan la vida escribiendo sin aprender esto, y tú lo has conseguido en sólo unas semanas. Enhorabuena y un abrazo!

Manuel Cuesta dijo...

Que barbaridad amigo mío, estoy abrumado. Yo no diría tanto, hago lo que puedo en un género que sólo había manejado de lejos, la responsabilidad de escribir semanalmente es grande. Ahora entiendo lo que tiene que ser hacerlo cada día y en la dimensión en la que tú lo haces. Recibo con muchísimo agrado esos halagos, pero tengo que seguir avanzando y aprendiendo mucho. Muchas gracias, Joaquín.

Abrazos.

VICTOR ALFARO dijo...

Yo reconozco que envidio la capacidad de sintesis y lo que consigue transmitir con cada artículo. Qué cabrón. A ver si me pega algo, jejejeje!
Por cierto, vi La carretera hace unas semanas y me dejó destrozado. Qué grande Vigo, y qué grande el niño. Y el papelito de la guapísima Charlize es pequeño, pero desolador. Me gustó todo... por cierto, irreconocible Robert Duvall como el pobre ciego, verdad?. Muy buena. Abrazos a los dos!

MIGUEL ANGEL dijo...

Como se ve que disfrutas hasta la saciedad con lo que estás haciendo, con el proceso, con la gente que lo rodea, se te ve pletórico, y yo que me alegro de corazón. Cuanta amistad, consejos, sabiduría compartida, y que bonito el poder compartir con la gente que te rodea tantas cosas que te llenan. Y que la gente disfrute de verte a ti feliz, es poético, es una dulzura.
Que envidia más sana de ver las reacciones que provocas en la gente, y cuánto te haces querer.
A ver si esta nueva edición, te trae el avión que despegue hacia la cumbre que te mereces. Eres un ser muy especial. Un abrazo, con todo el alma y un beso de hermano.

Manuel Cuesta dijo...

Bueno, bueno, bueno... Señores, no os paséis que no es para tanto ¡Que os puede el cariño! Jejejeje.

Víctor, la imagen de Robert Duvall en ese infierno es de lo más triste y duro de la película. Es cierto, yo no supe que era él hasta leerlo en los créditos finales.

En cuanto a la relación padre/hijo te diré que me pasé toda la película sobrecogido. Ese hombre sabe mostrar el valor/miedo con una capacidad impresionante.

Miguel Ángel, la verdad es que disfruto estando con amigos que además, acuden desinteresadamente a compartir mi proyecto musical. Eres sumamente generoso con todo lo que dices, de verdad. Y ya sabes que a ti y a los tuyos os deseo la mayor felicidad del mundo.

Un abrazo!

MIGUEL ANGEL dijo...

Lo se, y lo noto, lo siento, y te lo agradezco en el alma, pero de verdad no se, imagino que serás consciente del cariño que provocas, y eso es por algo ¿realmente lo sientes así? Yo creo que la modestia de la grandeza de un ser está en la humildad que tienes para aceptar lo que es palpable.

Miguel A. Ortega Lucas dijo...

Que sí, Manué, que sí. Que tiene toda la razón el colega Azaústre. A mí cada vez me parecen más exactas tus columnas, más en el punto justo para plantear más preguntas desde tus propias dudas, que es de lo que se trata, me parece a mí (porque las respuestas rara vez existen). Enhorabuena por todo, y a ver si más pronto que tarde me hago con el nuevo re-discazo y volvemos a vernos en las noches feroces de tu arte ;)

Un abrazo desde la torre de Babel del sur del Sur

Miguel A. Ortega Lucas dijo...

(Por cierto! Se me ha olvidao decirte que la película está a la altura de la novela, pero, pordiós, hazte con ella cuando puedas. Magistral y terrorífica. Si es que quieres seguir pasando miedo, claro :S)

Rodolfo Serrano dijo...

Va a ser un disco de culto, para guardar y rezarlo de vez en cuando